Andreas Moritz es un terapeuta excepcional. En su práctica integra disciplinas como el Ayurveda, la Iridología, Shiatsu y la Medicina Vibracional, es también escritor y un artista.
Nacido en el Suroeste de Alemania en 1954, Andreas tuvo que lidiar con varias enfermedades graves desde joven, lo que le obligó a estudiar la dieta, la nutrición y los diversos métodos de curación naturales, mientras que aún era un niño, para poder sanarse.
Con 20 años, Andreas había completado su formación en Iridology - la ciencia del diagnóstico e interpretación de los ojos - y Dietética. En 1981 comenzó a estudiar medicina ayurvédica en la India y completó su formación como profesional cualificado de Ayurveda en Nueva Zelanda en 1991.
Andreas nunca se sintió satisfecho con los métodos y las respuestas que ofrecía la medicina oficial para curar. “La medicina busca resolver los síntomas pero no las causas reales de la enfermedad”. Así él se vio inclinado hacia una búsqueda más holística y profunda rescatando métodos y prácticas milenarios como el Ayurveda o la técnica de mirar al sol.
Andreas Moritz es el autor de “La limpieza del hígado y la vesícula biliar”, “El cáncer no es una enfermedad” y “Los secretos eternos de la salud”.
Participa en un foro libre llamado: “Pregunte a Andreas Moritz” en Internet donde junto con la web de Curezone ha conseguido más de 5 millones de lectores hasta la fecha. Ha participado también en la elaboración de un nuevo e innovador sistema de curación - Arte Ener-Chi – que consiste en una serie de rayos de luz codificada que se expresan en óleos y que ayudan a restaurar de inmediato el flujo de energía vital (Chi) en los órganos y sistemas del cuerpo.
Adjuntamos un video en inglés de Andreas Moritz donde nos explica la importancia del arte para recuperar la salud integral del individuo.
“Contrariamente a lo que se cree, una enfermedad infecto-contagiosa no empieza cuando nos exponemos a un virus o a un a bacteria y nos infectamos, sino cuando nuestro cuerpo lanza su respuesta.
La magnitud de la respuesta de nuestro cuerpo (la gravedad de la enfermedad) no viene determinada por la magnitud de la infección, sino por nuestra resistencia y fortaleza. La fuerza curativa que emplea el cuerpo depende de muchos factores, entre otros las emociones, la espiritualidad, la dieta, el estilo de vida, el entorno, etc. Nuestra inmunidad no depende en absoluto de que hayamos sido vacunados contra agentes infecciosos. El factor fundamental de la inmunidad radica en la capacidad de nuestro sistema inmunitario para mantener a raya o combatir los gérmenes.
Cuando la respuesta inmune es débil, debido a que nuestro cuerpo está sobrecargado de toxinas, lo más probable es que los gérmenes nos infecten. En general, sin embargo, la mayoría de las “invasiones” de gérmenes suceden silenciosamente, sin molestarnos siquiera.
Los gérmenes sólo resultan tóxicos cuando se enfrentan a los venenos que creamos; nuestro cuerpo no lucha contra los gérmenes porque éstos sean enemigos. Una reacción del sistema inmune, como la fiebre alta o el agotamiento de energía, significa que el organismo se está limpiando de sustancias nocivas que, de otro modo, le llevaría a un descalabro total.
En situaciones de extrema toxicidad, el sistema inmunitario puede estar tan anegado en las sustancias tóxicas que incluso puede ser incapaz de salvar al cuerpo.
Cualquier persona proclive a padecer infecciones repetitivas quizás tenga un hígado lleno de toxinas, repleto de cientos de piedras acumuladas en los conductos biliares y la vesícula. Los cálculos, que albergan muchos tipos de virus y bacterias infecciosas, son una fuente constante de agentes inmunosupresores. Limpiar el hígado de cálculos es la mejor prevención contra cualquier tipo de infección”.
Andreas Moritz con su medicina sitúa la salud en manos de cada uno. ”El estado de salud no es más que el reflejo de cómo cada persona se percibe a sí misma y a su mundo”, nos dice. Sus libros, claros y concisos, nos acercan a una medicina holística que nada tiene que ver con lo que nos tiene acostumbrados la medicina oficial. Sus tratamientos, respetuosos con el cuerpo y la mente, buscan encontrar y solucionar las causas reales de las enfermedades y no los síntomas. Su método incluye la medicina tradicional, el ayurveda, la kinesiología, el arte, etc.
Con rigor científico (basándose siempre en experimentos y resultados estádisticos) nos desmiente mitos de la medicina actual y explica:
1. Cómo nos envenenan la mayoría de los analgésicos y las vacunas.
2. Cómo la mayor parte de las enfermedades están provocadas por crisis de toxicidad que soporta el cuerpo.
3. Cómo el sol es beneficioso y cómo los bronceadores son tóxicos.
4. Cómo comer y descansar correctamente.
5. Como hacer limpiezas interiores de hígado, vesícula,riñones y colon sin efectos secundarios ni molestias posteriores. (los autores de este artículo hablamos con conocimiento de causa, ya que hemos realizado estas limpiezas y constatamos la eficacia de las mismas).
6. Cómo los microondas son nefastos.
7. Cómo el cáncer, el sida, las alergias, las enfermedades coronarias o la diabetes se pueden prevenir y curar.
Andreas Moritz es sin duda un médico con pensamiento consciente que insiste en que nos eduquemos en vez de que nos mediquemos
sábado, 11 de septiembre de 2010
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